Proyecto Santa Pola, una joya familiar

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Cristina, una joven profesora de Alicante, se puso en contacto con nosotros porque tenía una idea muy clara de lo que quería y sabía que en la firma Ana García haríamos realidad la casa de sus sueños.

Una joya familiar con mucho potencial

Una reliquia familiar, con una excelente ubicación en Santa Pola, en segunda línea de playa, con el estilo clásico de los pueblos costeros y mucho potencial. Una vivienda, que heredó de su abuela, que, aunque llena de recuerdos, no encajaba con el momento vital en el que se encuentra y su personalidad dulce y alegre.

Por ello, nos mandó un completo briefing explicándonos todas sus ideas, detallando qué necesidades debe cubrir el diseño y cuáles son los estilos y tendencias que le gustaban. A partir de este primer documento, estudiamos su caso y nos pusimos manos a la obra para diseñar una propuesta.

Dando forma al proyecto

Una primera propuesta que le fascinó y con la que comenzamos a trabajar para lograr que Cristina pueda tener por fin el hogar con el que siempre soñó. Una reforma integral, que busca dar un aire completamente nuevo a la vivienda, con un diseño muy fresco, actual y acogedor, acorde con el espíritu de esta joven alicantina.

Pero antes de comenzar a dar forma al proyecto, se optó por derribar tabiques y modificar la distribución de las estancias, para lograr así un lienzo en blanco en el que poder trabajar. Gracias a esta decisión, se ha conseguido ganar una gran cantidad de espacio a la vivienda, que debido al diseño tradicional de las casas de antaño estaba desperdiciado.

Santa Pola y su mezcla de estilos

Un proyecto que destaca por sus formas orgánicas, gracias a las líneas curvas que dominan el diseño de aire mediterráneo, que representa a la perfección el enclave único en el que se encuentra la vivienda, pero con un estilo mucho más contemporáneo. Y que a la vez combina de una forma muy natural con el estilo escandinavo que tanto le gusta a la dueña.

Una tendencia de diseño muy en auge en los últimos años gracias no solo a su resultado estético, también por su sencillez, elegancia y funcionalidad. Donde los materiales naturales, como la madera, junto a la luz, son la línea conductora de todo el diseño.

Y ese ha sido el caso del Proyecto Santa Pola, donde la madera está presente en todas las estancias, que destacan por ser muy luminosas gracias a la pintura a la cal y a ciertas decisiones de diseño tomadas para dar prioridad a la luz natural. Como es el caso del dormitorio, donde se optó por sacrificar una ventana para instalar en su lugar un espectacular fijo de cristal panorámico.

La elección de texturas de carácter mediterráneo, junto con la paleta de colores en tonos tierra que predomina en todos los espacios, también han sido dos de los elementos clave para lograr esa combinación de estilos que Cristina buscaba y que representa tan bien su personalidad.